Un voluntario húngaro en Paraguay: un poco de história …

Según la leyenda dos hermanos Tupí y Guaraní llegaron a las selvas de amazonia de tierras remotas mas allá del mar, de ellos trazan su descendencia los indios Guaraní y Tupí.

 

No me resulta difícil imaginar que lo que lo la ciencia europea llega a revelar solo en el sigloXX., precisamente que los indigenas de las americas tienen origen asiático, en la memoria colectiva de los nativos está presente hace miles de años.

Más adelante los caminos de Guaraní y Tupí se separaron por unas disputas entre sus esposas. Tupí se fue para el norte, lo que hoy sería el territorio de Brasil, mientrás Guaraní se fue al sur a tierras que hoy conocemos como Paraguay, Uruguay y norte de Argentina.

Aunque los Guaraní era un pueblo muy numeroso que en habitaba extensas zonas no crearon ni un estado fuerte ni aspiraron a ser un imperio dominante. Vivieron en pequeñas aldeas en condiciones seminomadas, en parte por la erosión contínua de las tierras que cultivaban, por otro lado por sus creencias religiosas que les empujaron hacía la constante busqueda de “Yvy marane’ŷ es decir las Tierras sin Mal. Fueron poligamos y tenían bastante libertad sexual antes del matrimonio, y mantenían relaciones mayoritariamente pacíficas con sus vecinos.

Los incios del siglo XVI. trajeron cambios que nadie hubiera imaginado en la vida de los Guaraní: apareció el hombre blanco en el sur del continente americano. Los europeos venían en busca de oro y de grandes ciudades como El Dorado. Los Guaraní al principio eran orgullosos de su relación con los extranjeros, les llamaron rovaja es decir cuñado, al igual que nosotros húngaros nuestros vecinos occidentales.

Los primeros europeos a disfrutar la hospitalidad guaraní llegaron en los primeros años 1500s, Alejo García en 1524, Sebastian Gaboto en 1528, y el fundador de Asunción Juan Salazar de Espinosa en 1537.

Tras la gran mortandad y ambiente hostil de Buenos Aires casi la totalidad de la población de la ciudad fue trasladada a Asunción en 1541. Debido a ello durante mucho tiempo Asunción fue la ciudad mas importande de la región del Río de la Plata, fue “amparo y reparo de la conquista” y “madre de ciudades”.

La relación pseudo amistosa entre los nativos y los conquistadores no duró mucho. La colonización agresiva no ganó la apreciación de los Guaranís, y los levantamientos indigenas fueron sofocados en sangre, y miles de mujeres indigenas fueron secuestradas de sus aldeas por los españoles. Los cronistas escandalizados describen Asunción como el paraíso de Mahoma por la cantidad de mujeres que convivieron con cada colonizador. De allí surge la característica peculiar de Paraguay, que la población es fundamentalmente mestiza pero el lenguaje más utilizado siuge siendo el guaraní, que la madre guaraní transmitó la su hijo.
En 1555 se distribuyeron las primeras encominedas, 20,000 indígenas fueron repartidos entre 320 españoles. Los varones con sus familias quedaron en los campos para trabajar mietrás unos 750 mujeres servían en las casa de Asunción. El sistema de encomiendas sofocó la movilidad social y destruyó las bases socio económicas de la comunidad Guaraní.

La explotación desmesurada y codiciosa dió lugar a una seria de rebeliones indigenas a partir de 1559 a 1582 que considerablemente ralentizaron el proceso de colonización. ( esto continuará)

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